Hacia 2 meses que había estado en la sala Sol (Madrid) para ver a Christina Rosenvinge y a Tulsa en directo. Música personal e intimista. Ahora tocaba hacerle un hueco al rock, bien es verdad que ya había visto la presentación que Shuarma había hecho de su nuevo álbum “El poder de lo frágil”, en el pequeño y coqueto Pícaro café de Toledo.
Eran pasadas las 23:30 h cuando Shuarma salió al escenario de una sala Sol que había colgado el cartel de entradas agotadas. El músico salio vestido de negro riguroso: Chaqueta, chaleco, camiseta y pantalón ligeramente acampanado, recordaba muchísimo al Shuarma que pudimos en su primera etapa en Elefantes.
Fueron 2 horas de rock del bueno, de energía y entrega sin límite. Se fueron sucediendo los temas de "El poder de lo frágil" como: La única opción, Otra ráfaga de luz, Virgen de Guadalupe, Falta de amor o Despierta, tema con el que empezó el concierto. También hubo tiempo para recordar temas de su disco anterior “Universo” como fueron El niño que fui ayer, El universo o El tiempo se puede parar, donde algunos recordamos los coros con los que Bunbury colaboró en “Mas Universo”. Tampoco faltaron temas de la anterior etapa musical de Shuarma al frente de Elefantes. Entre los temas seleccionados de esta etapa sonaron Somos nubes blancas o la incombustible Azul, tema que contó con la colaboración de Sus, actual pareja del músico.
Uno de los momentos mas especiales del concierto fue homenaje en forma de canción que le hizo al maestro Antonio Vega, con su mítico, tema Lucha de Gigantes. Como el propio Shuarma había anunciado en una entrevista previa al concierto, el concierto iba a contar con aun invitado especial. Para todos los que nos gusta este espacio musical, sobre la 6 o 7 canción tuvimos el placer de ver como Shuarma nos anunciaba la presencia de Morti en el escenario. Además, la canción elegida no podía traernos mejor sabor de boca, Magenta. Tema de la arriesgada comuna musical que supuso Bushido. Para finalizar el concierto, Shuarma eligió La felicidad, otro tema de Bushido.
El músico estuvo próximo y cómplice con el publico que se allí se congrego. Una vez finalizado el concierto, Shuarma charló un rato con los fans que aun quedaban en la sala.
En mi opinión, fue un gran concierto, buen Rock aderezado con los toques de sensibilidad que caracterizan al músico. Con Shuarma me pasa algo similar que con nuestro querido Enrique Bunbury, y que es muy de agradecer. Son músicos que buscan, arriesgan con nuevos sonidos y que navegan por las partes mas intimistas de ellos mismos para acabar subiéndose al escenario y ofrecernos Rock del bueno, tan extraño en estos tiempos.
Muchas gracias Shuarma por darnos Otra ráfaga de luz.
Texto y fotos: Víctor López.
Fueron 2 horas de rock del bueno, de energía y entrega sin límite. Se fueron sucediendo los temas de "El poder de lo frágil" como: La única opción, Otra ráfaga de luz, Virgen de Guadalupe, Falta de amor o Despierta, tema con el que empezó el concierto. También hubo tiempo para recordar temas de su disco anterior “Universo” como fueron El niño que fui ayer, El universo o El tiempo se puede parar, donde algunos recordamos los coros con los que Bunbury colaboró en “Mas Universo”. Tampoco faltaron temas de la anterior etapa musical de Shuarma al frente de Elefantes. Entre los temas seleccionados de esta etapa sonaron Somos nubes blancas o la incombustible Azul, tema que contó con la colaboración de Sus, actual pareja del músico.
Uno de los momentos mas especiales del concierto fue homenaje en forma de canción que le hizo al maestro Antonio Vega, con su mítico, tema Lucha de Gigantes. Como el propio Shuarma había anunciado en una entrevista previa al concierto, el concierto iba a contar con aun invitado especial. Para todos los que nos gusta este espacio musical, sobre la 6 o 7 canción tuvimos el placer de ver como Shuarma nos anunciaba la presencia de Morti en el escenario. Además, la canción elegida no podía traernos mejor sabor de boca, Magenta. Tema de la arriesgada comuna musical que supuso Bushido. Para finalizar el concierto, Shuarma eligió La felicidad, otro tema de Bushido.
El músico estuvo próximo y cómplice con el publico que se allí se congrego. Una vez finalizado el concierto, Shuarma charló un rato con los fans que aun quedaban en la sala.
En mi opinión, fue un gran concierto, buen Rock aderezado con los toques de sensibilidad que caracterizan al músico. Con Shuarma me pasa algo similar que con nuestro querido Enrique Bunbury, y que es muy de agradecer. Son músicos que buscan, arriesgan con nuevos sonidos y que navegan por las partes mas intimistas de ellos mismos para acabar subiéndose al escenario y ofrecernos Rock del bueno, tan extraño en estos tiempos.
Muchas gracias Shuarma por darnos Otra ráfaga de luz.
Texto y fotos: Víctor López.
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Porque las cosas...
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